FILOSOFÍA
De mandado es un proyecto que conjunta el trabajo de dos artistas mujeres que por circunstancias de la vida, no residen en el lugar donde nacieron y esto les ha permitido enriquecer el propio bagaje cultural gracias a sus segundas patrias, las cuales, sólo refieren un orden de aparición y no de importancia.
De mandado es un proyecto que conjunta el trabajo de dos artistas mujeres que por circunstancias de la vida, no residen en el lugar donde nacieron y esto les ha permitido enriquecer el propio bagaje cultural gracias a sus segundas patrias, las cuales, sólo refieren un orden de aparición y no de importancia.
En cualquier asentamiento rural o urbano, las personas no importando la edad, estrato social, nacionalidad o género: cargan, transportan y/o colectan cosas a lo largo de sus vidas. De igual manera, estas personas en algún momento se encuentran, se cruzan, se ignoran o se miran en la extrañeza de la incomprensión de las necesidades del otro, aunque por un instante intuyen el atisbo recíproco del entorno. Cada rostro encubre una historia divergente y cada historia lleva consigo un mapa y brújula errátil imantada con sus propios deseos y aspiraciones, la cual, en muchas ocasiones termina por ser ignorada debido a la necesidad o dependencia por esos objetos de “uso obligado” que llevan cargando. Es por eso que la BOLSA -objeto soporte de este proyecto- es el vehículo que permite por un lado, mostrar las historias de los lugares que ha recorrido de la mano de alguien, y por otro lado permite asomarnos al interior y observar aquello que se ha colectado a lo largo del tiempo y que ha quedado guardado en otros sitios de no tan fácil acceso como son: los recuerdos, los secretos, los apegos y los aferramientos; ya que el espacio destinado para ellos… sólo está en el corazón.
En este sentido, el contenido de las bolsas tiene que ver con el tiempo, pero no el que marca un reloj sino el que se guarda en la memoria universal en donde la identidad - presente y clara - es parte de una cartografía incluyente y global cargada de actualidad. Con ellas intentamos recrear un ambiente habitado por el cuestionamiento, provocando intencionadamente una reflexión y respuesta por parte del espectador que lleve a otros niveles de entendimiento.
De mandado pretende en síntesis, activar la memoria, dando un toque de llamado a la conciencia. Es una invitación a hacer una revisión y replanteamiento de lo esencial, de lo valioso y de lo que es realmente necesario conservar.
